Algunos trucos para decorar la buhardilla

Si eres una de las personas afortunadas que esconden una buhardilla en su casa, cuentas con un espacio soñado y envidiado por muchos amantes de la decoración. Las buhardillas son lugares con encanto propio y las novelas y el cine las han idealizado durante años. Esos jóvenes artistas que vivían en buhardillas parisinas, o ese guapísimo actor que leía sentado junto al ventanuco de su buhardilla en Roma, han hecho que las buhardillas sean ahora espacios románticos y que llaman a la ensoñación.

Sin embargo, la realidad de las buhardillas es que son espacios escuetos que no nos dan mucha libertad de movimientos, a lo que se le suma en la mayoría de los casos una nefasta iluminación. Sin embargo, podemos recoger algunos trucos que hacen que las buhardillas reales se parezcan más a las que hemos imaginado en la ficción. ¡Apunta estos consejos si tienes previsto hacer una reforma de ese rincón de casa!

LOS TECHOS

Al estar restringidos por techos bajos e inclinados, debemos cuidar todo lo posible su forma y color para asegurarnos de que nos dan el máximo espacio posible (o al menos que lo parezca). Para empezar, no tengas miedo de dejar las vigas al aire. Ya sean en tonos madera o pintadas de blanco, es mucho mejor dejar las vigas abiertas que cerrarlas con madera o yeso. Ten en cuenta que cuanto más espacio abierto (aunque se vea el andamiaje), más luz tendrá la buhardilla.

Por otro lado, pese a que estamos acostumbrados a ver tonos madera en las buhardillas, te recomendamos que uses el blanco como color predominante. El color blanco es el mejor reflectante, lo que hará que la estancia tenga (o parezca tener) mucha más luz. Por otro lado, el blanco ayuda a ampliar el espacio, lo que disminuirá la sensación de techos bajos.

DÓNDE COLOCAR EL ALMACENAMIENTO

Lo más recomendable es que aproveches las zonas de techos más bajos de tu buhardilla como espacio de almacenamiento. Pequeños armarios, cajones o estanterías son diseñados y construidos específicamente para estos espacios. Lo ideal, es construir un mueble a medida para aprovechar al máximo el hueco creado.

LA CAMA

Si tu plan es usar la buhardilla como dormitorio, debes partir de una regla básica: La cama debe ser baja. Nada de somieres altos o camas con dosel. Lo ideal es que la cama esté a ras de suelo, para lo que recomendamos usar tablas, somieres bajos sin patas o con patas cortas o aventurarse en el mundo del palé.

APUESTA POR UN ESTUDIO O ZONA DE LECTURA

Aunque los dormitorios son uno de las opciones más comunes cuando se habla de restaurar las buhardillas, la última tendencia es diseñar tu zona de trabajo. Un escritorio o dos junto a la ventana, o bien estanterías hechas a medida que se ajustan a todo el espacio llenas de libros para esos momentos de lectura a solas. Si lo que necesitas es encontrar un espacio donde concentrarte y evadirte del ajetreo para trabajar o disfrutar sin ruidos ni problemas, la buhardilla puede ser tu nueva mejor amiga.

(Imágenes vía Pinterest)