Baldas de escayola o pladur: diferencias

Las estanterías con baldas de escayola o pladur son muy populares por el aspecto moderno que aportan al hogar y el aprovechamiento que permiten del espacio, especialmente en casas pequeñas.

¿Baldas de escayola o de pladur?

La construcción de estanterías con baldas de escayola o pladur (nombre comercial usado para las placas laminadas de yeso) es muy popular gracias a la versatilidad que ofrecen. Aunque ambos materiales son similares y visualmente no ofrecen diferencia, cada uno tiene unas ventajas distintas.

Las baldas de escayola se componen de placas realizadas a base de escayola y fibra. Es un material más económico que el pladur y con más facilidad para transportarse. La escayola se debe utilizar cuando se quieran realizar trabajos de pequeño tamaño con baldas que no vayan a soportar mucho peso, ya que su resistencia al mismo es menor. Asimismo, tiene el inconveniente de que puede acabar agrietándose por las vibraciones en las paredes de un edificio.

El pladur, por su parte, está compuesto por placas de cartón/yeso atornilladas a una estructura metálica previamente distribuida. Su principal ventaja con respecto a la escayola es que, si se le quiere poner algún material aislante (acústico, hidrófugo…), éste se acoplará mejor. Además de esto ofrece mayor limpieza en el montaje, versatilidad y resistencia. Debido a su interior metálico soporta más peso que la escayola. Como desventaja, no permite realizar trabajos muy finos y pequeños.

Las principales diferencias estéticas entre los dos materiales se corresponden con su estructura y grosor. En escayola el grosor de la balda es de unos 4 cm y su estructura es maciza. Por su parte, en el pladur se construyen unas estructuras metálicas que forman el armazón junto a las placas de cartón/yeso, por lo que suena hueco. Este armazón permite elegir el grosor deseado (normalmente unos 7 centímetros).

Ventajas e inconvenientes de los muebles de obra

Las ventajas y los inconvenientes de las baldas de escayola o pladur son las mismas que las de cualquier mueble de obra construido con estos materiales.

Las ventajas de los muebles de obra son:

  • Son muy versátiles: se puede construir prácticamente cualquier estructura con yeso y escayola: baldas, librerías, cabeceros de cama, alacenas…
  • Los muebles de obra pueden tener multitud de acabados y formas.
  • Son muy resistentes.
  • Se adaptan a cualquier espacio del hogar, por lo que son una buena opción para optimizar el espacio en casas pequeñas.
  • Son muy duraderos y resistentes a la humedad y los golpes.
  • Sus materiales no son muy caros y su construcción es relativamente sencilla.

Los principales inconvenientes de los muebles de obra son:

  • La inversión inicial será más cara que la de un mueble tradicional, aunque a la larga se amortiza.
  • La durabilidad se puede acabar volviendo un inconveniente. Los muebles de obra no se pueden mover ni sustituir por otros si nos cansamos de ellos o queremos recolocar el mobiliario.
  • Las obras traen consigo molestias como la suciedad y el ruido.

Construcción de estanterías con baldas de escayola o pladur

La construcción de estanterías con escayola o pladur es muy similar. La principal diferencia es que en las de escayola la balda va pegada mediante cola, mientras que en pladur se colocan con tacos y tornillos. Aunque lo mejor para construir estanterías de obra es contar con la ayuda de un profesional, si quieres hacerlo por ti mismo hay que seguir los siguientes pasos:

  1. Realizar un plano con las medidas exactas del espacio donde vayan a ir ubicadas. Para una buena resistencia del conjunto hay que tener en cuenta la relación entre la longitud y la anchura de cada balda, así como el apoyo en las piezas verticales que componen la estantería.
  2. Dibujar en la pared la estantería. En el caso de la escayola, se tendrán que hacer pequeños agujeros para después rellenarlos con la cola. En el caso del pladur, habrá que fijar los perfiles con tacos y tornillos para crear la estructura.
  3. Cortar las piezas de la estantería: en escayola se hace con serrucho y en pladur es suficiente con usar un cúter. Este corte debe ser lo más precios posible.
  4. Fijación: en escayola se aplica material de cola o escayola a cada pieza y luego se fija con gatos y cuñas hasta que se seque. En el caso del pladur, se atornillan las placas de cartón/yeso sobre la estructura.
  5. Rejuntado: se aplica una masa sobre las juntas para unir el conjunto de las baldas. No se debe aplicar pintura hasta que se seque por completo.